Pablo Reynoso perpetúa su sello “tecnicolor” con los monitores 2X8V Symphonic Acoustics
- Escrito por Redacción ISP Música
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Incluso más conocido que por ser un ingeniero de grabación y mezcla, el copropietario de Miami Beach Recording Studios (MBRS), Pablo Reynoso, es famoso por sus magníficas habilidades en el diseño y producción de música.
Pablo ha trabajado con artistas tan diversos como Lil' Wayne, Paul Messina, el Boston Choral Ensemble, Styx o Three Dog Night. Para él, con cada proyecto llega una aventura nueva, para la que se entrega al máximo. Produce desde el Estudio A de MBRS con su característica gama de matices tonales policromáticos, y ha participado con su seña “multicolor” característica para los últimos discos de Orishas, Yuri, Concha Buika, Yotuel e Ivy Queen.
Cuando tuvo que invertir en sus primeros monitores de estudio a finales del año pasado, Reynoso buscó, sobre todo, unos equipos que fueran lo suficientemente versátiles como para reproducir las frecuencias y matices con los que él trabaja. Así fue como decidió llamar a su amigo P.K. Pandey, fundador de Symphonic Acoustics, quien le recomendó instalar un conjunto de monitores 2X8V a medida con subwoofers de 12" a juego.
Los monitores 2X8V de Symphonic Acoustics han sido creados con el equilibrio, la optimización y la eficiencia en mente, y diseñados junto al genio de la ingeniería George Augspurger, el otro socio fundador de WSDG, John Storyk, el ingeniero ganador del premio GRAMMY, Renato Cipriano y REDI Acoustics. Capaces de proporcionar un nivel de presión sonora de largo alcance, y con un gabinete de 13” de ancho, estos equipos tienen como objetivo brindar la mejor respuesta posible, a la par que se mantiene la estabilidad de la caja.
Entre sus rasgos sonoros podemos distinguir una ejemplar limpieza sonora, una amplia respuesta de graves, contundentes frecuencias medias y unos bajos muy suaves
Soñando en tecnicolor
Pablo lleva formándose en el mundo de la música prácticamente desde que tiene uso de razón. Su primer impulso lo recibió en la escuela superior Berklee College of Music, donde aprendió todo lo necesario para iniciar Technicolor Lounge Studios. Natal de Ciudad de México, creció en el seno de una familia amante de la música, y con solo cuatro añitos comenzó a acariciar su primera guitarra. Desde entonces, todo ha ido para arriba y, poco a poco, ha visto cumplir su sueño.
Y es que Pablo se pasó varios años diciéndole a sus amigos que él estudiaría algún día en la Berklee College of Music. Ese día llegó, por lo que se trasladó a Boston para estudiar síntesis musical, producción e ingeniería musical. En la escuela, no solo aprendió con unos docentes de primera categoría, pues también pudo conocer por primera vez las herramientas básicas del que sería su futuro oficio. Su generación, además, fue la primera a la que se le concedió una beca para la compra de ordenadores y equipos tecnológicos, y este incentivo fue estupendo para que pudiera montar su propia idea de grabación, Technicolor Lounge Studios, justo después de graduarse.
“Aunque me crié en México, siempre he sido muy de dejarme llevar por el sueño americano. Y ahora lo estoy viviendo. Entré a Berklee como músico y salí de allí siendo un profesional de la música, así fue como decidí que hacer música desde el otro lado del cristal es lo que más me apasiona”