Fender G-DEC. Aprender a tocar con un baby futurista

¿Quién no sabe aún que la compañía Fender es una de las más importantes en el mundo del guitarrista? Tanto en guitarras, bajos y amplificadores, esta organización representa los más legendarios modelos, usados por prácticamente todos los grandes de la música. Con esto ratificamos la auténtica calidad de los productos Fender, pues en su gama profesional hay pocas cosas que lo superen.

Llegados a este punto, nos sorprendemos con este pequeñín "G-DEC", caído en nuestras manos para banco de pruebas. Parece lógico pensar que el mercado tiene muy distintos nichos por cubrir. Público que empieza, que aprende y que no puede (ni tal vez deba) adquirir costosos y potentes amplificadores hasta introducirse realmente en el mundillo guitarrista. Nuestra cabeza, de forma instantánea tiene asociado a Fender con la gama alta, si bien, como todas las compañías, tiene líneas de producto más económicas, de diversos tipos de materiales y producciones, que se adaptan a las diferentes parcelas de consumidores (por precio y nivel).

Abrimos la caja
La propuesta de Fender es sincera, puesto que en la propia caja aparece un simpático aprendiz de guitarrista de escasa edad. Este detalle muestra, antes de probarlo, la intención de la compañía con este producto.

Un compacto combo de reducido volumen, con el tradicional y exquisito acabado Fender que incluye, como en sus "amplis" de última generación, un apartado de control digital.

¿Qué se puede hacer con el G-DEC?
La verdad es que una vez enchufada la guitarra y poniéndonos a curiosear, sorprende la capacidad didáctica y multifunción de este pequeño amplificador. Analizando por partes sus posibilidades:

- Afinador. Un práctico y muy sencillo afinador digital que permite mantener la guitarra templada en cualquier momento. Esta aplicación es válida tanto para los más experimentados como para el más absoluto "pardillo", pues aunque no tenga ni idea de afinar, conseguirá una afinación perfecta.

- Unidad de ritmos y acompañamiento. Esta sección me ha llamado la atención, pues aunque se trata de algo básico y sencillo, tiene una buena variedad de estilos que están "bien arreglados y suenan bastante compactos". Es evidente que un músico que pasa el nivel amateur sentirá escasez en estos recursos si busca en ellos utilidades creativas, si bien para el principiante e incluso para guitarristas más avanzados sus posibilidades para hacer ejercicios son realmente interesantes. Os lo explico. Las secuencias tienen cierta flexibilidad. Por una parte (como es lógico), puedes marcar el tempo al que deseas el acompañamiento; por otra, puedes seleccionar el estilo sobre el que quieres tocar: heavey, blues, metal, pop y un largo etc., pases bien identificados con cada tipo de música. Ahora, podrás elegir el tono en el que quieres la ejecución.

Bien, teniendo todas estas opciones resulta muy didáctico, puesto que si quieres practicar escalas, puedes ponerte un blues (por ejemplo) e ir cambiando el tono del acompañamiento para ejercitar todas las escalas de blues que conoces y recorrer el diapasón en todos los tonos. Esta operación será repetida en diferentes estilos para practicar escalas, acordes e incluso diversas técnicas según los efectos que vas poniendo (al tiempo) sobre el sonido de tu instrumento solista. Creo que este apartado, desde el punto de vista didáctico, es el que más me ha gustado del amplificador.

- Unidad de efectos. El G-DEC cuenta con una unidad multiefectos. Dentro de una calidad razonable en relación a su precio, dispones de una gran diversidad de sonidos, como distorsiones, wah, reverb, delays, chorus, flanger, phaser, etc, etc. Es posible editar y salvar los presets, así como manipular el nivel, profundidad o repetición. Su manejo es sencillo e intuitivo.

- Simulación de amplificación. En este apartado, la máquina te propone abundantes tipos de simulación, recorriendo de forma llamativa (considerando su precio y tamaño) gran cantidad de sonidos "auténticos" y muy diferentes. Desde aquí controla también los niveles de ganancia, graves, medios y agudos, compresión, timbre y la puerta de ruidos.

- Utilidades. Sección para la edición y almacenamiento.

- Conectividad, entradas auxiliares. G-DEC incluye una entrada para guitarra, salida de cascos, entrada y salida MIDI, control de tono y volumen (en potenciómetro), así como una entrada jack ¼ en su panel posterior y una entrada auxiliar estéreo en RCA (dos entradas, una por canal). Desde el panel auxiliar controlarás la señal de las entradas auxiliares.

- Grabación de frase. En el propio amplificador podrás grabar todo lo que esta sonando en él, es decir, ritmos, guitarras, acompañamientos, etc. Esto quiere decir que, para practicar, vuelve a ser perfecto. Por ejemplo, seleccionas "chicago blues" en ritmos y acompañamientos, te "curras" los acordes y cuando lo tienes listo, le das al play y al rec. Ahora ya tienes grabada la base con tu guitarra de acompañamiento y puedes hacer tu solo encima. La limitación máxima de esta función es el breve periodo de tiempo que puedes grabar. Para empezar a hacer tus pinitos y practicar, tiene su aquel.

Conclusiones
Creo que si habéis hecho lectura del banco de pruebas, tendréis claro de qué va este Fender G-DEC. En cualquier caso, resumo mis impresiones. Se trata de un amplificador que recuerda a los tradicionales "baby" (pequeños amplis de mano), pensado claramente para el principiante, práctica y aprendizaje. Dentro de estos parámetros, muestra unas calidades correctas y siempre bajo este punto de vista, ofrece un gran abanico de recursos para practicar escalas y acordes sobre variados tipos de música. También podrás empezar a familiarizarte con los diferentes efectos y sus usos, los tradicionales tipos de amplificador y sus sonidos, tocar sobre CDs o MP3 (conectando tu unidad reproductora a las entradas auxiliares, afinar e incluso juguetear con el MIDI, pues dispone de entradas y salidas (como ya he mencionado). En cuanto a su precio y aunque esté fabricado en China, es Fender, lo que supone (además del vacile con tus colegas porque tu ampli sea un Fender), garantías en su fabricación por la tradición de su marca y pagar lo correspondiente.