Menu

lupa    Login

Schecter 007 élite, otras opciones 7 cuerdas

Shecter-elite-7-cuerdasSchecter es una empresa norteamericana que se caracteriza por fabricar guitarras y bajos a todos los niveles y estilos. En los últimos tiempos hemos visto cómo compite con otras compañías del sector, aportando instrumentos de calidad a precios muy competitivos. Este mes, siguiendo la estela del artículo anterior, hablaremos de la guitarra Schecter 007 Elite de siete cuerdas, una de los varios modelos que posee la empresa en el catálogo de guitarras con una cuerda extra, entre las que se encuentran: c-7 Blackjack, c-7Hellraiser, Damien-7, Omen-7 (extreme).

Cuando cae en tus manos un instrumento así te saltan preguntas de diversos tipos: ¿Cómo sonará? ¿Será cómoda? ¿El acabado será el adecuado? ¿Afinará correctamente?, etc. Estas preguntas son completamente distintas a las que te haces cuando caen en tus manos instrumentos con un nombre detrás, ya que sólo por el hecho de tenerlo, no deberíamos cuestionarlas. En este caso, la Schecter 007 Elite responde positivamente a todas esas preguntas y más. He de decir que una de las cosas que me llamaron la atención fue la estética; al verla, lo primero en lo que te fijas es el color (la unidad que sometí a prueba era de color Black Cherry) y el acabado tan detallista, pero a su vez te das cuenta del hardware, los cortes... y dices: “Esta guitarra está pensada y hecha para disfrutarla”.

Maderas
Comencemos a destripar una por una todas las secciones de la guitarra que nos atañe. Si nos fijamos en el mástil podremos observar que está constituido por tres piezas de caoba. El color de la guitarra se extiende por todo el cuerpo y también por el mástil, dejando entrever, gracias a su transparencia, la caoba y las tres partes que forman el mástil. Principalmente en la parte superior, a partir del segundo traste, podemos observar, en forma de “U”, cómo se encola el grueso del mástil, con la sección que soporta la pala.

El diapasón se encuentra construido en palorrosa, la verdad que bastante “oscurito” para los tiempos que corren, donde esta madera escasea mucho, y nos acostumbramos a ver los diapasones de palorrosa cada vez más claros. En el borde del mástil tenemos los puntos que nos van indicando cada uno de los trastes convencionales (1, 3, 5, 7, etc.). En el propio mástil sólo hay posicionada una incrustación, en el traste 12, a modo de diamante, el resto se encuentra limpio de señales.

El cuerpo está construido en caoba, con una tapa de arce flameado. Aquí reside uno de los secretos de esta guitarra, ya que va a despistar bastante con el resultado final. Cuando te dicen cuerpo de caoba ya piensas en un sonido grueso (“Les Paul”, etc.) y, encima, con una tapa de arce terminas de certificarlo; pero en este caso la guitarra encierra mucho más que ese sonido que estamos intuyendo. Hay que decir que la tapa de arce le da un aspecto de lo más distinguido y elegante, en definitiva no es la más indicada para acabar llena de pegatinas por todos los lados, esa madera es para disfrutarla, no sólo auditivamente, sino visualmente.

Hardware
El sistema de esta guitarra es un gran punto fuerte, ya que nos proporciona opciones muy óptimas para la configuración de las mismas. Vamos a comenzar desde la pala e ir bajando por todo el mástil, hasta acabar en el cuerpo.

En la pala nos encontramos con siete clavijas Grover cromadas en Black Chrome, que son perfectas para cualquier guitarra de puente tun-o-matic o fijo (como es el caso). Estas clavijas ayudarán mucho a nuestra afinación, así como a una mayor precisión cuando estemos buscándola. Además, hay que pensar que las Grover son geniales para soportar una gran cantidad de tensión, ya que al poseer una cuerda extra la presión que ejercen éstas es mucho mayor. Además, los Grover son standard, en el sentido que no tienen la entrada de la cuerda elevada, disminuyendo la tensión y, por tanto, perdiendo tono en este tipo de guitarras.

La cejuela es algo bastante definitivo para varias cosas importantes en la guitarra, como es el tono y la afinación. En este caso, la cejuela parece ser que está construida de teflón o algo similar, la cual nos permite no rozar demasiado las cuerdas y, por tanto, solucionar cualquier problema de romperlas. Por otro lado, si la cejuela no está limada y tiene los espacios correspondientes para que apoyen las cuerdas, sufriremos problemas de afinación. Hay que tenerlo muy presente, sobre todo en este tipo de guitarras de siete cuerdas, donde la afinación es tan delicada, pero en la 007 Elite está completamente cuidado al detalle.

Los trastes son 24 de tipo jumbo, los cuales nos permitirán una mayor comodidad a la hora de pulsar las notas, es decir: al ser más altos y anchos tenemos más aire entre la cuerda y la madera y, por tanto, más sonido. El ser más anchos nos permite no desafinar, como ocurren con otros trastes altos pero estrechos. En muchas ocasiones nos encontramos guitarras en las que los trastes no están muy bien acabados por la zona de los límites del mástil, rozando la mano cada vez que pasa por ellos. En este caso están cuidadosamente limados y redondeados. Por otro lado, el mástil está completamente pintado, con su capa “ a lo Gibson”; hay guitarristas a los que esto no les importa, e incluso les gusta, a mí personalmente no, ya que a la larga se acaba convirtiendo en un problema, porque suele retener el polvo del ambiente, el sudor de la mano, etc. creando una fina película que te acaba frenando la mano y dificultando el slide por el mástil. Además, en este caso es aún más importante, ya que al poseer siete cuerdas tenemos más mástil, más superficie con la cual rozar la mano.

Por último tenemos el puente y la entrada de las cuerdas. Una de las principales características de esta guitarra es que, teniendo un puente fijo de este tipo, las cuerdas atraviesan el cuerpo. Esto es muy importante en el sonido final. Cuando tenemos un puente fijo, las cuerdas suelen venir desde el principio de la guitarra, eso hace que el máximo punto de tensión se encuentre en cuánto de alto esté el puente; pero al tener las cuerdas atravesando el cuerpo, la tensión es mayor en los puntos de salida de éstas por él, haciendo que el sonido se trasmita más al cuerpo y vibre en frecuencia con la cuerda. El puente utilizado en la 007 Elite es TonePros Tom con cuerdas al cuerpo. Este puente nos permite, mediante unos tornillos en los laterales, acercar más el puente al cuerpo y, por tanto, conseguir más trasmisión a la guitarra, así como más tono y sustain. En definitiva, me parece un gran acierto utilizar este tipo de puente para conseguir el mayor tono posible.

Circuitería
La guitarra viene equipada con dos pastillas Duncan Designed HB 102 y SC 102, pensadas para guitarras de siete cuerdas; consiguiendo ese refuerzo en graves que necesitas controlar, sobre todo cuando golpeas la séptima cuerda. Aquí encontramos una de las virtudes de la 007 Elite. Generalmente, este tipo de guitarras suelen venir equipadas con pastillas dobles, eso hace que se encuentren muy destinadas a ciertos estilos de música, más fuertes; pero en este caso, el tener una pastilla doble y otra simple, la convierte en una guitarra mucho más versátil, ya que posee todas las opciones posibles. Pero aquí no acaba el asunto, la guitarra tiene un control de volumen general y otro de tono, el cual es de push-pull, permitiendo utilizar la pastilla HB como doble o como simple; eso hace que el conmutador de tres posiciones que viene equipado, sume dos posibilidades más a las tres opciones anteriores. Hay que agradecer que el cambio de pastillas esté ladeado, para así poder hacerlo fácilmente cuando tocas al modo Stratocaster. Por otro lado, el hecho de utilizar un push pull para hacer “single” la doble nunca me pareció lo más cómodo, a lo mejor un selector de cinco posiciones, algo más a mano, ya que en situaciones de estudio tienes todo el tiempo del mundo, pero cuando estás en directo la facilidad de acceso es impagable.

Ensamblaje
Por tanto, después de todo esto, llegamos a uno de los secretos mejor guardados de esta guitarra, y es que dentro de su aspecto oscuro y que parece, por así decirlo, bastante rockero. En muchas posiciones podremos encontrar “twang”, y eso es debido al conjunto de clavijeros, cejuela, puente y construcción de la pala que, al no tenerla demasiado inclinada, hace que tengamos ese sonido característico, nada común en este tipo de guitarras.

Por otro lado, hay que hacer hincapié en que la guitarra tiene la propiedad de que el mástil se encuentra encolado al cuerpo; esto hace que la trasmisión de la nota producida en el mástil pase al cuerpo, consiguiendo mucho sustain, ya que no existe aire en el zócalo donde descansa el mástil sobre el cuerpo. Por otro lado, al no estar atornillado perdemos ataque, es decir, notas más largas pero menos altas.

La unión del cuerpo y el mástil está pensada para poder acceder hasta los últimos trastes con toda la comodidad del mundo. Se encuentra rebajada de tal manera que, progresivamente, disminuye hasta perderse en el cuerpo.

El cuerpo posee el rebaje tipo strato en la parte superior de la guitarra, lo cual yo agradezco personalmente, ya que después de un par de horas tocando sentado, aparece el típico dolor en las costillas derechas, pensando que la guitarra que acabas de tocar no es nada ergonómica.

Sonido
El “a qué suena” el instrumento es el otro factor importantísimo de la guitarra. Ya hemos ido viendo un poco cómo puede sonar. Por un lado, vamos a hablar de cómo suena la guitarra en general y, por otro, vamos a tratar la séptima cuerda (por separado). El sonido de la guitarra, a primera vista, es muy versátil debido a los siguientes ingredientes: caoba, pastilla doble, pastilla simple y cuerdas atravesando el cuerpo. Posicionándonos en la pastilla simple del mástil, poseemos un sonido muy cercano a una strato, con twang pero un poquito más oscura, por así decirlo, una “strato vitamina”, genial para sonidos bluesy, para crunchies, y sonidos limpios. Puestos a pedir algo más, yo pediría un poquito más de grosor en el sonido y, quizás, un poco más de ataque. Pero también hay que recordar que no es una strato como tal, ni quiere serlo. La posición media, personalmente, es la que más me ha gustado, sin perder el carácter strato, le da un poco más de cuerpo, apareciendo nuevos armónicos, así como un sonido más crunch en general. Al pasar a la posición del puente, olvidamos cualquier reminiscencia strat y pasamos a algo más “Les Paul”, sonido muy grueso, con un gran sustain y mucho más oscuro. En esta posición los armónicos salen solos y, por así decirlo, es la más agresiva.

Con respecto a la séptima cuerda, tenemos una gran opción, al sonar como una nota extra más, pero muy equilibrada con el resto no supone algo añadido. La afinación la conserva, lo cual es altamente importante en la séptima cuerda.

Este tipo de guitarra va orientada al público más rockero /metal pero que, además, se preocupa de que sus partes más down (suaves) suenen de verdad y empasten con el resto de la banda, lo cual muchas veces olvidamos. Esto es lo que nos proporciona un instrumento de este nivel; hace que cuando lo toques con tu grupo todo el mundo se gire y piense “qué fácil es tocar contigo” (siempre y cuando la ejecución sea la adecuada).

Tacto
Al colocar la guitarra y empezar a tocar acordes, solos, rítmicas, etc. te das cuenta de lo cómoda que se es debido a:

a) Mástil cómodo, bastante plano, no muy grueso y, aunque sea grande, por la séptima cuerda, muy confortable.

b) Cuerpo muy ergonómico. Fácilmente adaptable a ti.

c) Ligera de peso, hace que las sesiones de local no sean una pesadilla por cargar en tu espalda, pero sin renunciar a la caoba.

d) Trastes infinitamente cómodos; por otro lado, habría que comprobar la durabilidad de los mismos.

e) Gran facilidad en acceder a los trastes más altos.

Conclusión
La Schecter Elite 007 es una guitarra muy versátil, con una gran cantidad de sonidos en ella misma, muy seria en la afinación y, sobre todo, en la ejecución y confort. El precio es muy competitivo y, por tanto, la relación con respecto a la calidad es muy recomendable. Por otra parte, los puntos que le restarían son detalles como las pastillas Duncan Designed, podrían ser Seymour Duncan y “Crafted in South Corea”; a muchos guitarristas se preocupan del origen hasta llegar a ser determinante. La estética es inmejorable, muy atractiva, dándole un aire de lo más elegante con esa tapa de arce semitransparente.

¿Todavía no tienes una cuenta? ¡Regístrate ahora!

Acceder a tu cuenta

Qué quieres ver?

Elige tu red preferida.