El nuevo concepto Musikmesse 2016, preparado para el 2017

El centro de exposiciones de la feria de Frankfurt se convirtió, entre el 7 y el 10 de abril, en el indiscutible centro de negocios y plataforma de presentación del sector de los instrumentos musicales en Europa. La feria dio un giro a su concepto para tener en cuenta las expectativas individuales de la industria y, así, orientarse hacia los retos y las tendencias sociales actuales. Con este relanzamiento Messe Frankfurt ha generado nuevos impulsos para el comercio internacional de instrumentos y para los aficionados a la música.

Durante el estreno de este nuevo concepto, más de mil ciento tres expositores presentaron sus últimos productos e innovaciones en la sección oeste del centro de exposiciones de la feria de Frankfurt. Más de sesenta y cuatro mil visitantes se acercaron a esta feria, que mantuvo el alto nivel de asistencia de años anteriores. Además, más de veinte mil aficionados de la música acudieron a los más de cincuenta conciertos ofrecidos por el festival de Musikmesse que, por primera vez, tuvo lugar al mismo tiempo que la feria en diferentes escenarios de Frankfurt.

«En la era digital en la que vivimos el contacto directo con el consumidor es más importante que nunca y lo tuvimos muy en cuenta a la hora de rediseñar la feria. A la vez, ampliamos nuestras instalaciones y servicios para facilitar el comercio de instrumentos musicales», explicó uno de los miembros de la junta directiva del Messe Frankfurt, Detlef Braun. El nuevo concepto, según Braun, ha demostrado ser el idóneo y así lo demuestra «la respuesta positiva de los visitantes y el apoyo de numerosos miembros clave de la industria». Braun afirmó que continuarán trabajando en la misma dirección con las asociaciones, los expositores y el sector en general.

Como ya ocurrió en años anteriores, la nueva edición de Musikmesse atrajo a participantes de todo el mundo. Un total de cincuenta y dos naciones estuvieron representadas por los expositores y los visitantes llegaron a Frankfurt de más de ciento ocho países diferentes. Las nacionalidades que más se dejaron ver por el festival este año fueron la alemana seguida de la italiana, la holandesa, la francesa, la suiza, la belga, la británica, la española, la austriaca y la polaca. Frankfurt se convirtió, gracias a Musikmesse y la feria internacional de tecnología, sistemas integrados y creación Prolight + Sound, en el centro de atención de las empresas de música y eventos.

Para implementar este nuevo concepto de feria, Musikmesse abrió un auditorio específico dirigido exclusivamente a los minoristas, los distribuidores y otros profesionales. A parte de esto, se llevó a cabo un programa de información minucioso y se pusieron a disposición de los comerciantes visitantes unas nuevas instalaciones de networking. Paralelamente, los aficionados de la música pudieron compaginar, por primera vez, su asistencia a la feria y a un extenso programa de eventos que incluía conciertos, talleres y coloquios.

Esta vez, el sector decidió que Musikmesse se llevase a cabo de jueves a domingo y no de miércoles a sábado como ocurría en el pasado. Las sinergias con Prolight + Sound se pusieron de manifiesto durante los dos días de solapamiento —jueves y viernes— entre las dos ferias. El director general de la Sociedad de Minoristas de la Música (SOMM), Daniel Knöll, alabó la labor de innovación, de entretenimiento educativo y networking tanto de Prolight + Sound como de Musikmesse. «Hemos demostrado que las dos ferias son unas de las plataformas más importantes del sector a nivel alemán, europeo e, incluso, mundial», explicó. Además, no pudo evitar su entusiasmo ante el hecho de que «este éxito demuestra que el negocio de la música sigue siendo una materia muy importante para la sociedad».

Muchos de los expositores principales alabaron el nuevo concepto de la feria. Martin Moritz, Product Manager de Casio en Europa explicó que muchos visitantes se acercaron a su stand «que estuvo realmente visitado durante la feria. Los organizadores han dado un paso en la buena dirección con este nuevo concepto: desde el primer día pudimos empezar a negociar a la vez tanto con consumidores como con minoristas. Además, no solo presentamos nuestros productos sino que obtuvimos feedback de lo que los clientes quieren». Por su parte, el CEO de Julius Blüthner Pianofortefabrik, Knut Blüthner-Haessler, resumió las jornadas diciendo que «Musikmesse fue muy productiva para la empresa. Nos hemos ido a casa con nuevos contactos y pedidos. La feria recibió mucha asistencia, especialmente durante los tres primeros días. Vinimos a Frankfurt para reunirnos con minoristas y músicos y lo hemos conseguido».

Por primera vez, un solo expositor ocupó el edificio Portalhaus al completo en la zona oeste del centro de exposiciones del recinto ferial de Frankfurt. Más de mil metros cuadrados estuvieron a la disposición de Yamaha para que presentase sus productos. «Nos ha sorprendido gratamente el ambiente y el desarrollo de la feria. El número de minoristas fue muy bueno durante los dos primeros días y el flujo de consumidores creció muy por encima de lo esperado ahora que la feria abre todos los días» expuso el director alemán de Yamaha Music Europa, Michael Stöver.

Charlas, mesas redondas y diferentes actividades complementaron el buen ambiente entre empresas, minoristas, distribuidores y clientes. Este año Musikmesse ofreció una amplia gama de estilos e instrumentos: los visitantes pudieron elegir entre rock, pop, música clásica, jazz o electro y comprobar de primera las novedades en la industria de los instrumentos. Hubo espacios para los clásicos de lo analógico y los modernos de lo digital e, incluso, para los indecisos que se quedan a medio camino entre ambos.

El gran vencedor de las jornadas fue, sin lugar a dudas, el festival de música Musikmesse que sacó el ritmo del recinto ferial para invadir Frankfurt. Al Jarreau, Axwell /\ Ingrosso, Laith Al-Deen, Eisbrecher o Tube & Berger, entre otros muchos, hicieron las delicias de los visitantes. Este concepto de llevar la música y la feria a las calles ha sido, según la organización, un gran acierto y lo que ha reavivado el espíritu de Musikmesse.